Este año ha sido histórico en la hermandad por un hecho ya conocido y más que criticado como ha sido el segundo año consecutivo que la hermandad no realiza su Estacion de Penitencia.
Los motivos son más que justificados, un riesgo de agua del 80% hasta las 20:00del Jueves Santo, una nube negrísima sobre San Agustín a la hora de la salida, algún chispeo ocasional muy disperso y malaje.
El Soberano y la Madre de Dios decicieron que de nuevo la penitencia de la hermandad. Otro año más en casa, como los buenos agricultores el Hijo de Dios ha decidido dar descanso a la tierra y que se regenere este campo de amor a Él y Su Bendita Madre del Rosario.
El año que viene, si Ellos quieren, será. El año que viene rezaremos para que el Jueves Santo se escriba de nuevo con mayúsculas, para que de nuevo sea uno de los dias que relucen máas que el sol.
El año que viene, si es posible, se abrirán de nuevo las puertas de San Agustín, cuando el sol entrel por los ventanales de la iglesi e ilumine el rostro del Hijo de Dios, colocado su paso justo delante de la Madre Salesiana, un saludo ligero, un respeto de Hijo Divino y habrán pasado nada más y nada menos que 740 días sin Él en la calle, sin bendecir Linares y sin que la Madre de Dios recoja el desparrame de amor y súplicas de este pueblo que la ama y que la quiere bajo su divino palio.
Es el momento. Ahora debemos reflexionar, recapacitar, madurar y dar esa vueltecita de tuerca que Ellos nos piden desde sus pasos dos años anclados en el muelle de San Agustín. Es el momento de arriar velas, es el momento de tomar impulso, es el momento de ser fuertes, creer y estar convencidos.
Como los cristianos antiguos pasaremos por la mofa y la burla, por eso y por Ellos ojalá el año que viene sea especial.
Algo me dice que la Gloria se acerca el 8 de abril de 2009, algo me dice que Dios Prendido y Su Madre recorrerán magníficos las calles de Linares tras dos años de ausencia.
Fuerza y Valor hermanos
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